ANSE es miembro de la red Metasysteme Coaching

Testimonios de clientes
Testimonios de clientes de empresas y de clientes que se formaron en el coaching sistémico con nosotros

Desde 2003 que Anse existe con mi socia Evelyn Muñoz, son más de 6500 horas de coaching sistémico individual, de equipos y de organizaciones.

En Latam, hasta 2023, también hemos realizado más de 17 ediciones de formación en coaching sistémico de la escuela internacional Metasysteme de Alain Cardon. Nuestra escuela está acreditada en Nivel 2 y AATC (coach de equipo) por la ICF.

Agradecemos a todos nuestros clientes que nos han enviado sus testimonios compartiendo sus experiencias.

TESTIMONIO DE COACH SISTEMICOS QUE SE FORMARON CON NOSOTROS EN LATAM Y ESPAÑA DESDE 2012

Dulia Ortega, Lina Jerves, Salua Buale, Verónica García:

Se formaron en la edición 16ª y tomaron la decisión de crear un equipo de coach sistémico y unas de su forma de prospectar es a través de Podcast, en estos 2 primeros Podcast hablan de lo que les permitió la formación. Somos orgulloso de sus realizaciones.

 
 

Julian Hiervas, Coach Sistémico:

La formación en coaching sistémico de equipos ha sido una experiencia transformadora para mí en muchos aspectos. No solo he aprendido habilidades poderosas para ayudar a los equipos a tener éxito, sino que también he descubierto una profunda satisfacción personal al facilitar el crecimiento y desarrollo de los individuos dentro de los equipos.

Esta formación ha cambiado mi perspectiva sobre el liderazgo y me ha permitido prosperar tanto a nivel personal como profesional.

Isabel Juárez, Coach y Directora de Amagi International:

La formación en coaching sistémico de equipos fue un elemento esencial para el cambio cultural en nuestra empresa, Amagi. Como coach, contribuí a establecer una cultura de confianza, apertura y colaboración dentro de nuestro equipo.

Esto tuvo un efecto dominó en nuestros clientes. Nuestros clientes se sienten más comprometidos, las ideas circulan con más libertad y la creatividad está en su punto máximo.

En última instancia, esta formación fue el catalizador de nuestro éxito como empresa centrada en la innovación y la eficiencia.

Evelyn Muñoz, Coach y Directora de NewOak:

La formación en coaching sistémico de equipos ha transformado radicalmente mi capacidad para servir a nuestros clientes de manera excepcional.

Como coach, adquirí habilidades para comprender las necesidades de nuestros clientes a un nivel más profundo y para trabajar de manera más efectiva en equipo para satisfacerlas. Gracias a esta formación, pudimos resolver problemas más rápidamente, ofrecer soluciones más personalizadas y aumentar significativamente la satisfacción de nuestros clientes.

Para cualquiera que trabaje en un ámbito centrado en los clientes, esta formación es un activo invaluable.


María Jesús Blasco Blanco, Repsol Directora de Personas y Organización en Áreas Corporativas, Coach Interno:

Tuve la oportunidad de formarme con Claude como coach sistémico como parte de la primera promoción de un grupo de coaches internos destinados a fortalecer la cultura de delegación en Repsol.

Esta experiencia me ayudó a comprender mejor el ADN de los equipos de trabajo con los que colaboré y de la sociedad en su conjunto, lo que constituye la base de la cultura y las normas de comportamiento en nuestra organización. También, a nivel personal, esta experiencia me permitió mejorar mi contribución y fortalecer mi compromiso con los equipos a los que pertenezco y los que dirijo. Gracias a herramientas simples, los equipos pueden mejorar significativamente su cohesión y rendimiento, canalizando mejor la energía y utilizando de manera más eficiente el tiempo dedicado a la definición de objetivos, la planificación y análisis, la gestión de alianzas, el seguimiento, el control de la toma de decisiones y su implementación.

Como líder, dar un paso atrás para empoderar a su equipo es un ejercicio que, en principio, puede ser arriesgado; pero una vez iniciado, resulta adictivo para el líder y para el equipo, generando gradualmente nuevos adeptos en la organización y convirtiéndose en un catalizador del cambio cultural.

Joël Chatzimichalis, CEO de Toute La Marée:

La formación en coaching sistémico de equipos fue un punto de inflexión en mi carrera. Como gerente, presencié la increíble transformación de mi equipo después de aplicar las habilidades que adquirí. Nuestra colaboración mejoró, los conflictos se volvieron raros y el rendimiento colectivo aumentó significativamente.
Recomiendo encarecidamente esta formación a cualquier persona que busque crear un impacto positivo duradero en los equipos.

Eva Martinez, Coach Sistémico:

Mis ganancias tras vivir la formación ANSE-METASYSTEME
  • He ganado más paciencia a la hora de acompañar al cliente en su silencio y más valentía, confianza y tranquilidad a la hora de emplearlo yo. Como resultado, un silencio más eficaz, útil y poderoso. 
  • He aprendido a crear un espacio más amplio, de mayor libertad y perspectiva para el cliente y para mí como coach.
  • Me ha ayudado a prestar mayor atención durante las sesiones a los hechos “casuales” y en apariencia poco importantes, para convertirlos en fuente de grandes oportunidades. 
  • Me ha ayudado a ofrecer el coaching de una manera diferente, “Vivirlo,  más que conocerlo”, aplicable también a la formación.
  • Una formación sistémica y muy “musical”, el alumno-coach-director de orquesta hace sonar cada instrumento-herramienta.  Poco a poco los va integrando, uno detrás de otro, un silencio de vez en cuando, cada uno provoca y evoca  algo diferente en el alumno-cliente. De repente… los hace sonar a la vez  y la sesión se convierte en una magnífica sinfonía y “tacháááán” el alumno-cliente consigue su deseado resultado, o no…pero al menos el alumno-coach lo ha intentado y practicado.
  • Mi conciencia sistémica  se ha ampliado y  he aprendido a integrarla tanto en mi vida profesional como en la personal. Lo que he ganado  para una,  me es de gran utilidad para la otra.  Ahora observo la vida, desde el punto cercano hasta el más lejano,  o a la inversa, o a la vez, de manera diferente y  soy más capaz de participar en ella, si quiero,  de una forma más consciente y útil.
  • Esta formación ha dado más fuerza a mi convicción y creencia de que para crecer como coach, también hay que crecer como persona y el hecho de ser una formación muy práctica desde su comienzo nos posibilita a los alumnos ir creciendo juntos en ambos sentidos.  “ Un gran lujo y un gran regalo para mí el poder haber sido  clienta de tantos compañeros-coaches  y tan  bellísimas personas “.
  • El feed-forward tras cada práctica me parece muy potente y de gran valía para mi mejora como coach……y por supuesto, como persona. Estaría bien dármelo más a menudo a mí misma en el día a día. Ahora mismo empiezo
En definitiva, la formación Metasystem ha supuesto una  buenísima inversión para mi vida, por todo lo que me ha traído, por todo de lo que la ha llenado y por todo lo que la ha agrandado.

Fernando Anso, Coach:

Recientemente, durante una sesión de Coaching Ejecutivo con una directiva, pude observar  una resonancia sistémica en lo que el Cliente estaba compartiendo conmigo. Al devolverle esa resonancia surgió en ella una perspectiva diferente  que le invitó a pensar desde un lugar distinto desde el que venía haciéndolo, así como a pasar a la acción para resolver un asunto que, de un modo inconsciente, le generaba mucho sufrimiento.

Durante la sesión, el Cliente me contó que su Padre había sufrido un Ictus y que había sido ingresado. Estaba preocupada y con la cabeza puesta en la evolución de su Padre más que en los asuntos profesionales sobre los que, a priori, deberíamos trabajar. No obstante, su discurso estaba centrado en el trabajo. Comenzó a contarme cómo aquel día "todo" estaba fallando. Falló la impresora, falló el servidor y la centralita de las comunicaciones. Terminamos la sesión y le deseé pronta recuperación para su Padre.

Dos días después, el Cliente me llamó para compartir conmigo que su Padre había recibido el alta y que ya estaba en casa. Estaba muy feliz. Le pregunté por los servicios de fotocopiadora, servidor y comunicaciones que habían fallado días atrás. Me dijo que,  casualmente, el día que le dieron el alta a su Padre, todo comenzó a funcionar. Le dije: " es como si al tiempo que a tu Padre le dejó de funcionar una parte de su cuerpo, dejaron de funcionar otras cosas en tu vida". Es cierto, dijo mientras se quedaba pensando. A continuación le pregunté: ¿Qué vas a hacer, cuando tu Padre no esté, para que todo siga funcionando en tu vida?. Permaneció en silencio unos minutos y contestó: Gracias. Va siendo hora de que me ocupe de este asunto.

Este es un buen ejemplo de cómo el Coaching Ejecutivo Sistémico permite resolver situaciones que, aun siendo del ámbito personal, tienen un impacto directo en el profesional.Como dice un referente para mí en el Coaching: "Las cosas no ocurren por azar..." 

Myriam Camps, Coach PCC

Esta formación me ha permitido:

1.-Adentrarme en el coaching sistémico, fui a realizar el curso por mi inquietud por todo lo sistémico y cada vez diento mas la importancia de ello. Este coaching me ha adentrado en la conciencia sistémica y cuando hago preguntas del tipo:  “ y quien mas tiene que entrar en tu sistema?” o “quien te perturba en tu sistema? o “que te pasa a ti en este sistema?, me doy cuenta de lo poderosas que son estas intervenciones en muchos casos, - el cliente siente algo distinto, se descoloca, se empieza a poner fuera de su marco de referencia. 

2.- Me llevo un  coaching que me sirve el cual combina lo mejor para el individuo o grupo y gracias a la magnífica y clara orientación a resultados del mismo, también lo mejor para la empresa. Es un coaching muy eficaz y sobre todo muy eficiente. 

3.- Aprender a trabajar el proceso, no el contenido del cliente. El proceso es el contenido del coach. Que difícil me parecía ese concepto al principio, no lo captaba ni sabía cómo hacerlo, y de repente un día se me encendió la bombilla y lo entendí. Qué potente! – De hecho os voy a contar una experiencia vivida: tuve una sesión con un cliente extranjero, en inglés (no doy más datos por confidencialidad) – dicho cliente era un empresario que tenía su propio negocio, me explicó con cierto detalle el objeto de su negocio, él quería hacerlo, lo necesitaba para que yo “le entendiera”. Pero el negocio  era tan sumamente técnico con terminología en inglés que yo desconocía, que no me enteré de casi nada – lo bueno es que me daba igual, no necesité enterarme de ello para centrarme en el proceso y a pesar de lo escéptico que el cliente venía a la sesión, él consiguió llegar a su resultado. Al final de la sesión me dijo: es la primera vez que explico mi negocio a alguien ajeno y lo entiende tan rápidamente – no le contesté, para qué?, solo sonreí.

4.- Conocer y aprender de Claude - directo, eficiente, cariñoso, exigente, seguro, desafiante, dominante, buen maestro - todos estos son mis juicios y valoraciones, lo sé, pero ahí los dejo. 

5.- Conocer y aprender de mis compañeros, somos un grupo pequeño y se ha creado una relación asombrosamente rica y transparente. 

6.- Hacer un contrato de coaching y saber vender el coaching. Es la primera vez que ambos conceptos los veo tan claros y la metodología aprendida es tan poderosa. 

Y he aprendido mucho más, he aprendido cosas que me pasan a mi, de mi entorno, de mi sistema, de mi vida, de mis proyectos, de mis retos, …… por todo ello, estoy mas que agradecida a la vida por haberme llevado a conocer este Programa. 

Merche Aranda, Coach MCC:

En el 2006 me formé en una de las escuelas de Coaching más prestigiosas de Estado Unidos, la formación que recibí fue de alto nivel. Me aporto una perspectiva lógico-lingüística muy alta  ya que desarrolle mi comunicación directa, me hice consciente de la importancia que tiene generar cambios de perspectivas para el cliente y confiar que él es quién tiene todas las respuestas que necesita. Aprendí a escuchar lo que dice y lo que no dice, su musicalidad y sus entonaciones, sus incongruencias entre lo que dice y lo que su cuerpo expresa. 

Recientemente he tenido la oportunidad de ampliar mi formación con la escuela Anse-Metasysteme, que me ha permitido desarrollar un nivel de excelencia en competencias como la presencia y  la escucha, desde el silencio y conectarme con el proceso del Coaching de una manera muy diferente. Yo por características personales, siempre he tenido una gran capacidad de escucha, que se desarrollo más si cabe con mi anterior formación, pero con la perspectiva del Coaching sistémico de la escuela  Anse-Metasysteme, he tomado conciencia  de verdad con lo que es el sistema y como escuchar desde el silencio a este sistema.  

Y desde esta forma de escuchar ahora hago menos preguntas, de forma mucho más  profundas, cortas e intuitivas, enfocándome más al proceso y no tanto al contenido.Mi forma de estar, de observar y sentir lo que sucede en la sesión es totalmente diferente. Yo buscaba una forma de hacer Coaching  desde las entrañas y en Anse-Metasysteme lo he encontrado. Es un Coaching de sutileza, generador de cambios muy profundos en muy poco tiempo. Me ha sorprendido su forma de trabajar con las emociones y me ha aportado nueva perspectiva de abordarlas.

Otra aportación que me ha gustado mucho es como se trabaja continuamente el código ético, ya que ponen al Coach en un continuo punto de respeto hacia el cliente.Un escrupuloso cuidado con el establecimiento del contrato. Además, otra cuestión muy importante es cómo te enseñan a preparar tu mente para el proceso de venta del Coaching sin que este se convierta en un producto, sino desde lo que eres y lo que sientes.

También he aprendido hacer una gestión del tiempo de las sesiones de forma más eficiente. Y por último desde la perspectiva sistémica de Metasysteme he empezado a desarrollar mi conciencia sistémica y ahora sí que tengo claro que no hay diferencias entre hacer Coaching a una persona, a un equipo o a una organización. 

Rafael Casenave Lee, Repsol, Ingeniero de Minas, gestor de fiabilidad industrial

Las sesiones de formación de coaching sistémico con Claude han sido un regalo para mí. Me siento muy afortunado de haber podido vivir esta magnífica experiencia que me ha permitido un crecimiento personal muy importante y me ha dotado de herramientas para aprender a observar las cosas de forma distinta y a interactuar con las personas de manera más activa y positiva. 

Pienso que la formación me ha permitido cubrir el objetivo que me pedía mi empresa: la contribución a la facilitación de equipos y el cambio hacía modelos de trabajo en equipo de alto rendimiento. Los equipos que reciben el acompañamiento descubren que pueden ser más fuertes como equipo y que, en un momento dado, son dueños de su voluntad para dirigir sus pasos hacia las metas que decidan fijarse. Ejercitan el conocimiento de cómo son como equipo, cuáles son las fortalezas de los distintos componentes del grupo, cómo pueden aportar cada uno de ellos y, lo que suele ser más importante, qué es lo que realmente quieren conseguir. 

Llegados a este punto, algunos equipos, normalmente los que buscaban con intensidad este acompañamiento, comienzan a trabajar como equipo integrado y comprometido y navegan con eficacia hacia sus objetivos alcanzándolos rápidamente. Otros equipos que pueden dudar si realmente quieren cambiar y hacer algo distinto, al menos son conscientes de que puede hacerse. Ahora saben que, si quieren, pueden ponerse en camino.

Mis colaboradores se benefician de una forma distinta de hacer las cosas en la que, partiendo de un conocimiento claro de cuál es la misión del equipo y sus objetivos, se pone por delante de las actuaciones el “qué”, el “cómo” y sobre todo el “para qué” de las mismas, se busca la participación activa de todos los miembros del equipo y se fomenta el desarrollo y autonomía de sus atribuciones. El ser conscientes de que las diferencias de las personas que forman el equipo son un recurso relaja las relaciones en el grupo y facilita la asignación de tareas y funciones. Otro aspecto clave diferencial con el pasado es el enfoque de los fracasos que pasan a ser puntos de aprendizaje y promotores de cambio para mejora futura.

Desde un punto de vista personal, esta experiencia ha sido el punto de partida de un gran cambio interior. Llegó en un momento de mi vida en el que, de forma más o menos consciente, era conocedor de que había algunos aspectos propios con los que me estaba encontrando incómodo y que, en el fondo, me estaban haciendo infeliz. Interiorizar de una forma coherente esta nueva forma de enfocar los retos me ha hecho moverme a acciones que me están permitiendo resolver mis dudas y a identificar con más claridad cuáles son mis metas personales y como debo conseguirlas. Ciertamente está siendo un hito significativo que está marcando una nueva etapa en mi vida.

Beatriz Díaz, Coach PCC:

Como decía Gaudí para ser original hay que volver a los orígenes y para mí este curso es lo que ha significado. Ir al origen,  a  la esencia del oficio de ser coach. 

Experimentar el poder del silencio a través de una autentica escucha ha cambiado mi estilo de hacer coaching, con efectos extraordinarios, mágicos y poderosos. Me acerque a esta formación para descubrir el poder de lo que emerge, algo que yo sabía que estaba en mí, pero que temía en ocasiones, ofrecer al cliente. Ahora no tengo miedo de compartir lo que sucede en el sistema creado por el cliente, del que formo parte.  

Poner luz en las sombras, saber conectar con esa energía ha dado más sentido a mi forma de ser  y hacer coaching.

Es cierto que me he resistido a desaprender. ¡Ay el ego del coach! Pero cuando lo he hecho,  la experiencia de estar fluyendo con mis clientes, con mis compañeros, con

Claude me ha permitido un profundo sentimiento de alegría, de conexión con algo que me permite ser yo misma y a la vez formar parte de algo más grande que yo.

Experimentar el poder de la presencia, esa presencia sin intención, confiando en los recursos del cliente. Este curso me ha permitido conectar con esa forma de estar en la relación de coaching. También me ha recordado que nada más serio que cultivar el sentido del humor con el cliente aportando ligereza ante situaciones. 

También me ha permitido incrementar mi negocio porque Claude te proporciona claves para conectar con los clientes, claves aparentemente sencillas, pero que destilan sabiduría y que son fruto de un camino lleno de aprendizajes.

Esta formación es como hacer surf entre las olas, miras el mar,  el horizonte Pacientemente, pero con atención plena esperas esa ola. No existe nada mas a tu alrededor. Ese momento es único, pero mas único es el momento en que la ola empieza a romper lanzando agua sobre tu cabeza. 

Sientes que estás en el momento indicado, en el lugar indicado. Es un instante de perfección, placer, diversión y paz, que aunque dura unos segundos y sabes que lo vas a tener presente toda tu vida. 

Gracias Claude por recordarme como subirme à las olas. 

TESTIMONIOS FACEBOOK: un Diálogo entre Lourdes Cabero y Merche Aranda

Hemos construido un grupo en Facebook que encontrarás en mis pagina Facebook Claude Arribas y el grupo: Coaching sistémico escuela METASYSTEME. Aquí algunas reflexiones de los alumnos durante la formación:

Lourdes: Familiarizarse con la consciencia sistémico para hacer coaching individual y de equipo:

Quiero hablar de la importancia de la comunidad de prácticas entre reuniones en el éxito de la formación en coaching sistémico de la Escuela Metasysteme.Entre una y otra fase, los alumnos practican coaching sistémico más de 200 veces en breves secuencias cliente/coach, coaching/feed-forward. Gracias a esta práctica repetida y continuada nos familiarizamos con un estado mental similar al de la meditación (para los budistas meditar significa familiarizarse con un estado interno) y generamos una conciencia que nos permite vivir con total naturalidad las sincronicidades y las resonancias y percibir por encima de todo el proceso del cliente, sea este un individuo, un grupo o un equipo.Es esta conciencia sistémica la que nos permite hacer intervenciones o preguntas que permiten a los equipos alcanzar resultados extraordinarios en poco tiempo. Gracias a la conciencia sistémica en esta comunidad de prácticas se genera un espacio común de interacciones muy productivo y auto-gestionado donde vivimos distintas experiencias que son las experiencias de muchos sistemas humanos, sean equipos de trabajo, deportivos, asociaciones, etc: voces individuales, voces que se integran en una sola voz muy diferente a la suma de todas, que tienen un ritmo y sentido propios, voces que son una posibilidad porque hay permiso para la experimentación.Silencios, energía en cadena, melodías sorprendentes, rugidos, falsetes, solos queriendo sostener a los demás, voces que saben callar para no tener que sostener a las demás, voces que siempre se cuelgan de las otras, voces que se van y vuelven, voces periféricas.Son las voces y los silencios del grupo las que permiten seguir sosteniendo el espacio común de perfeccionamiento y resultados.Y cuando hacemos coaching sistémico con equipos de dirección, departamentos, etc, sabemos crear las condiciones para su máximo desempeño, sin sed de herramientas poderosas, porque la herramienta está en nosotros mismos, es nuestra conciencia sistémica.

Merche: Menos es masMENOS ES MAS,

va dando sentido al coaching de la intuición, es muy cierto lo que dice Lourdes, cuando estás acostumbrado hacer un coaching más del contenido y de la lógica, el coaching sistémico crea incertidumbre. Igualmente es fascinante la perspectiva de estar en un estado de conciencia y silencio, para que emerja "la pregunta", pasan tantas cosas en ese espacio que merece la pena estar en él. Y para alcanzar maestría no hay otra forma que practicar y practicar y practicar. Y como todo lo que practicas con gusto y pasión "engancha".Lourdes: Menos es masEn mi compromiso con para difundir la Escuela de Coaching Sistémico Metasysteme quiero compartir la experiencia de la segunda jornada de formación de Fundamentos de Coaching Sistémico de Metasysteme en Madrid. Entre módulos, habíamos practicado la escucha y el silencio de manera intensiva. "Yo no temo al hombre que ha lanzado 10,000 patadas diferentes, yo temo al hombre que ha lanzado una patada 10,000 veces" (Bruce Lee) .En esta jornada le llegó el turno a las PREGUNTAS. Son muchos los tipos de preguntas que se pueden formular, una buena muestra y clasificación está en la web.

De nuevo, MENOS ES MAS:

aprender todas estas preguntas para después elegir hacer sólo la intervención que emerge de un estado de escucha que los coaches sistémicos entrenamos constantemente. Constaté que muchas veces en coaching sobran preguntas, sobran patadas.

Simultáneamente al programa formativo, en el “sistema” estaban emergiendo otras dimensiones fascinantes: Algunos coaches experimentábamos el desafío de nuestros propios aprendizajes previos, el reto de simplemente estar en el proceso para hacer “La pregunta”. Tanto o más eficaz que las preguntas, el HUMOR permitió que desde nuestro inconsciente afloraran algunas soluciones llenando de energía el ambiente.  

También pusimos nombre a lo que ya todos habíamos experimentado: las conexiones sistémicas, las sincronicidades, las resonancias. Integrando con naturalidad esta CONCIENCIA SISTEMICA el coaching es más profundo, eficaz y los resultados se alcanzan mucho antes. Otra dimensión que pudimos experimentar espontáneamente fue el COACHING DE EQUIPOS DE ALAIN CARDON. Desde la primera sesión habíamos generado una serie de interacciones entre los participantes, empezando a auto-organizarnos en torno a objetivos sencillos relativos a los horarios, a explorar la relación con el líder, la delegación, a tomar decisiones colectivas. Ya durante las jornadas, un triste acontecimiento, el fallecimiento del padre de una de las participantes, dio lugar a que entre todos buscáramos soluciones para ayudar a nuestra compañera ausente a ponerse al día, reforzándose nuestra identidad colectiva. Claude, como coach, nos ayudó a progresar como equipo y a experimentar nuevos roles. Algo tan duro como un fallecimiento estaba dando lugar al NACIMIENTO de una conciencia colectiva, algo grande y creativo. 

Merche: Coaching sistémico y Fisica Cuántica. 

Las palabras de Lourdes me han resonado. Una lección sencilla.Dicen que nada sucede por nada y son muchas muchas las reflexiones y preguntas que me vienen. Hoy quiero compartir la visión que he tenido después de una práctica y es que he vivido y experimentado esto que la física cuántica dice que bajar tanto el microscopio hasta llegar a la esencia y máxima expresión de pura energía. El ser y el estar en esencia pura y con metaposicón incluida. He tenido la sensación de que no había un tu y un yo, un coach y un cliente, había un espacio cuántico y sistémico. No lo puedo explicar más, no sé si esto es la conciencia sistémica, si lo es, experimentarla es increíble.Y siguiendo con las resonancias y siguiendo en línea con el Coaching y la Física cuántica comparto una idea de las enseñanzas de don Juan:"Cualquier camino es sólo un camino y no es vergonzoso, ni para uno mismo ni para los demás, abandonarlo si así te lo dicta tu corazón.... Observa detalladamente cada uno de los caminos. Ponlos a prueba tantas veces como creas necesario. Luego pregúntate a ti mismo, y sólo a ti mismo lo siguiente: "¿Tiene corazón este camino?" Si lo tiene el camino es bueno, si no lo tiene, no sirve para nada"

Lourdes Cabero, Coach Sistémico PCC

El primer grupo de alumnos de Fundamentos de Coaching Sistémico de Alain Cardon en Madrid inició su andadura el pasado 15 de Octubre 2012, de la mano de Claude Arribas. Quiero compartir algunos aprendizajes de esta maravillosa experiencia:

  • MENOS ES MAS. Se experimenta la escucha sin intención y la presencia sistémica, entrenando los gestos mínimos, precisos, para crear la relación en coaching. Menos preguntas, más espacio para que el cliente encuentre su sentido. Puro zen.
  •  NUEVAS CONEXIONES NEURONALES. Durante todo un mes, practicar y practicar, revisando y mejorando de manera constante, afinando y depurando la técnica, hasta lograr total seguridad y precisión.
  • TRABAJAR CON LO QUE EMERGE. Un ejemplo: un cliente que trabajaba sobre la pereza respecto a un asunto, sin apenas intervención del coach. Revisando la sesión, hubiera sido útil pedirle respetuosamente permiso para compartir una percepción (con la opción de discrepar, lógicamente) y tras esperar respuesta en silencio, comentar: ”observo que en este momento estás trabajando ¿cómo lo ves tú?”. Hubiera reforzado positivamente un comportamiento diferente a la pereza, del que no estaba siendo consciente.
  • FEED-FORWARD Idear opciones de mejora inmediatamente después de la secuencia de coaching es muy potente pues los aprendizajes se integran a nivel más profundo

Marisa Gómez, Repsol, Asistencia Técnica PP Extrusión, coach interna

Mi primera sesión de coaching sistémico tuvo como premisa escuchar en silencio. Atención plena, sin juicio, sin lenguaje verbal o no verbal. Parece sencillo, o no, y quizás esa sencillez fue la que me trasladó al camino de ver a través de un observador diferente. Nuevas palabras poderosas comenzaron a emerger en mi día a día como presencia, confianza, puntualidad… y creciendo en mi lo hicieron también en los equipos a los que posteriormente acompañé.

El coaching sistémico abre una puerta para hacer las cosas diferentes. Y genera un espacio de colaboración para que el equipo crezca y obtenga los mejores resultados. Si quieres cambiar, si quieres ganar, si quieres probar, acepta el reto y arriésgate a navegar. La travesía merece la pena.

Alfonso MENENDEZ CRUZ, Repsol, HSE Project Manager, coach interno

Cuando echo la mirada hacia atrás y pienso en el proceso que comencé hace 3 años y medio, formándome como coach sistémico para tratar de transformar la cultura de mi empresa a través de los equipos de trabajo, no puedo evitar pensar en lo que esto ha supuesto para mí desde el punto de vista personal y lo que ha supuesto sobre la cultura de mi compañía. 

Lo que he experimentado en este viaje hacia la transformación de la cultura de la compañía ha sido una transformación personal que cuando empecé no podía ni imaginar. A día de hoy estoy convencido de que, para ser coherente y poder impulsar esa transformación cultural, antes se tiene que producir una transformación personal para poder transmitir el cambio que se pretende.

Este proceso te confiere la adquisición de unas habilidades que no se pueden desligar de tu personalidad y de tu forma de ver y comportarte hacia la vida. Transforma tu vida, transforma tu entorno, es decir, transforma todo el sistema. Y en la época que nos ha tocado vivir, contar con las habilidades que te permitan generar cambio y transformación, ya sea como líder o como coach para ayudar a otros, es un regalo.

Héctor Díaz, Repsol, Gerente de Servicios Compartidos, QUIRIQUIRE GAS, S.A.

En ocasiones reflexiono sobre cómo llegue al programa de Coaching Interno de la compañía, siendo un Ingeniero Electrónico de profesión y habiendo labrado toda mi carrera profesional de 18 años en el área de operaciones y mantenimiento de la compañía; muchas veces esto causa en mis compañeros una mueca o expresión en sus rostros de - OK, ¿y a este qué bicho le picó? – y me encanta que se produzca ese momento el cual aprovecho para usarlo como gatillo para activar la curiosidad. En esta reflexión visualizo este camino como el camino lógico, puesto que el lazo que une una planta o una instalación de un resultado es la forma en que las personas desempeñan su labor, es lo que las hace de alto desempeño, o no. 

Es el desafío que tenemos los líderes actuales a nivel global, desafío que se convierte en preguntas como las siguientes: ¿Cómo llevamos a nuestros colaboradores a obtener Resultados Extraordinarios? ¿Cómo hacemos este proceso sostenible en el tiempo? ¿Cómo creamos un ecosistema de aprendizaje y eficiencia? ¿Cómo desarrollamos la autonomía de nuestros equipos? ¿Cómo tomamos decisiones asertivas y oportunas? ¿Cómo usas las diferencias como recursos al servicio del equipo y la compañía? ¿Cómo brindamos la oportunidad de brillar, de desarrollarse a un potencial por encima de las expectativas a cada uno de nuestros colaboradores? 

Transformación es la palabra que en mi opinión resume mi experiencia con el Coaching Sistémico, un cambio de mi marco de referencia y con él he influenciado positivamente mi entorno, un impulsor del cambio desde adentro hacia afuera, desde el interior hacia el exterior, desde la persona hacia los grupos de personas. Una estrategia poderosa que utiliza las diferencias como recursos para colocarlos al servicio del equipo y en su concepto más amplio al servicio de la organización.

La escucha sin intención y el silencio son mis herramientas más poderosas, de esa forma acompaño a mis clientes en resonancia con el sistema sin entrar en el contenido, es una habilidad que es compleja y sencilla a la vez; la práctica es la mejor forma de entrenarla y pulirla, puesto que desde el punto de vista de un Coach Interno es muy fácil entrar en el contenido del cliente y caer en la trampa, siendo éste uno de los riesgos más altos de este proceso.

El Coaching Sistémico permite avanzar, ir más allá, salir de la zona de confort, para explorar nuevos caminos, permite obtener un resultado “Extraordinario” ese que te deja con la boca abierta de emoción y sorpresa, ese que ni en tus sueños te habías imaginado.

Jesús Javier Rey Dopico, Repsol, Coach Interno

Me considero muy afortunado por el hecho de que mi empresa me haya elegido para formar parte de uno de los grupos con los que iba a impulsar su proyecto de transformación. Los comienzos fueron tan desconcertantes por mi desconocimiento del mismo como ilusionantes y retadores. Para mí la palabra “coach” significaba simplemente entrenador.

La primera intervención de Claude, la persona que con gran acierto la Empresa eligió para formarnos en coaching sistémico, fue para aclararnos lo que significaba. Con él lo primero que aprendimos fue, además de a ser puntuales, a guardar silencio cuando nos comunicábamos; ¡qué importante es escuchar y qué importante es la escucha activa!

Entre lecciones teóricas y prácticas coach-cliente supimos lo que es “actuar sin intención” o “realizar preguntas poderosas” o “dar feedforward”, “la influencia del entorno” y otra serie de conceptos y herramientas que fueron calando en mí poco a poco y que me envolvían cada vez más en algo que se convirtió en pasión y que sin darme cuenta me iba transformando como persona para hacerme mejor.

Y esa semilla que se había plantado empezó a germinar y el ser mejor me permitió, siendo consciente de la importancia de conceptos como tener claro el contrato o de decir lo que pienso, relacionarme de una forma más clara y eficiente con las personas de mi equipo y de ese modo poder obtener de ellas lo mejor para conseguir los objetivos marcados. La transformación que yo estaba experimentando estaba ya afectando de forma positiva a mi entorno laboral, lo que nos hacía y hace avanzar más fácilmente. Incluso el efecto positivo también se produjo en mis relaciones personales fuera del ámbito laboral. ¡Qué potencia la del feedforward que nos enseña que podemos dar nuestra visión de lo que otro ha hecho y además expresarle la forma en que pensamos que lo puede mejorar! Es increíble la receptividad y positivismo de los demás ante esta forma de actuar. Como anécdota, cuando actúo de esta forma mi mujer muchas veces me dice con ironía “Ya apareció el coach …”

Pero la transformación no se quedó ahí, en mi equipo o en mi círculo familiar o de amistades. Ya casi sin darme cuenta estaba empezando a poner mi granito de arena al proyecto del que me habían hecho partícipe y estaba ayudando a impulsar el cambio. Ahora recuerdo con humor mi nerviosismo en las horas previas a debutar ante el primer equipo que se me asignó para que lo acompañase como coach sistémico durante seis meses. Y ahí se demostró que cuando existe ilusión no hay barrera que se resista, ya que,  ese mismo nerviosismo que me atenazaba en los momentos previos desapareció en el momento de presentarme a los demás. Esos seis meses fueron también apasionantes viendo como mis intervenciones permitían avanzar al equipo a la toma de decisiones o como el modelo de los cuatro cuadrantes o el de las reuniones delegadas les hacían también a ellos ser mejores. Y esto no fue casual, con los siguientes equipos sucedió lo mismo. Las enseñanzas de Claude estaban produciendo resultados.

Hoy en día los resultados son evidentes y se aprecian claramente en toda la Empresa, tal y como observo en comportamientos, actitudes y procesos cada vez que me relaciono con las distintas áreas. La transformación es un hecho y no tiene marcha atrás. Partiendo de la transformación como personas hemos podido conseguir que nuestros equipos de trabajo y toda la organización también se transforme y continúe avanzando dentro de un proceso continuo y evolutivo que nos hace cada vez mejores.

Abel Frias Gómez, Repsol, Coach interno, coach externo

Tuve el privilegio de participar -junto a veinte compañeros más- en la primera promoción de coaches internos de Repsol, cuya formación nos fue impartida por Claude Arribas desde septiembre de 2013 a junio de 2014.

Aquella experiencia me produjo una gran transformación, tanto personal como profesional. Me despertó la creatividad, la capacidad de pensar y hacer pensar diferente, el deseo de escuchar, una mayor autoconfianza y estabilidad, en definitiva, un planteamiento positivo de la vida.

El acompañamiento a mis equipos me ha llenado de satisfacciones. Contribuir a su consolidación, a su mayor eficiencia y motivación hasta alcanzar sus retos, y sobre todo recoger el agradecimiento sincero de los mismos, es algo que “no se paga con dinero”.

Gracias Claude por todo esto que me has propiciado. Gracias por la ilusión y pasión que me has transmitido y que utilizaré para hacer del coaching mi nueva profesión.

Te deseo que tú nuevo libro sea un gran éxito, tanto como te mereces.

Javier Sopuerta, Repsol, Transforming while performing or Performing while transforming, Coach interno, coach externo

Repsol está desarrollando un proyecto de transformación cultural que le permita adaptarse a los nuevos entornos competitivos del mercado.

Lo que ocurre al plantear este tipo de iniciativas es que un proyecto de cambio “cultural” se suele identificar con “largo plazo”. Nada más lejos de la realidad: para traducir un cambio cultural en ventaja competitiva real hay que abordarlo con la máxima celeridad de suerte que el mercado perciba un “gap” claro frente a los competidores.

Pues bien, para lograr este objetivo Repsol pone en marcha un proceso de mejora del rendimiento que pasa por convertir al “equipo” (y no al líder formal o “jefe”) en el protagonista de las decisiones eficaces.

Y para ello se concierta la colaboración de Claude Arribas. Su objetivo: convertir a un grupo de colaboradores pertenecientes a distintos estamentos de la organización en “coaches” que propaguen el cambio y la mejora del rendimiento a toda la Compañía.

Tengo el honor de haber formado parte de ese grupo del cambio y de haber contribuido a ser un vector de mejora en esta Compañía.

Desde estas líneas quiero resaltar el extraordinario papel desempeñado por Claude en el acompañamiento hacia este proceso de transformación.

Cláudia Alves, Repsol Portugal, Ingeniera y coach interno

Como ingenieros siempre somos algo que escépticos ante este tipo de experiencias, llegamos con una expectativa muy baja “de qué nos van a vender ahora”, conmigo no ha sido diferente… pero al acabo de unas horas te das cuenta que algo captiva tu atención, es el momento en que te das cuenta de que de verdad funciona! Impresionante como algo tan simples puede al mismo tiempo ser tan poderoso, impulsando líderes, equipos y compañías a lograr resultados de excelencia y alto rendimiento

TESTIMONIO DEL MUNDO DE LA SALUD, DE CEO, LIDER DE EQUIPO, MANAGER QUE VIVIERON UN ACOMPAÑAMIENTO DE COACHING DE EQUIPO

Testimonios del mundo de la salud:

Para la conclusión, las palabras de Giesela Schweizer cuando dice lo más interesante tener elementos de orden en las dinámicas, tener un facilitador, un rol que mira el tiempo permite concentrar el tema, ya que muchas veces uno va a reuniones a ver un tema y termina hablando de muchos y no toma decisiones además se alargan,  las reuniones que podrían tomar 30 minutos se pasa, la metodología fue muy interesante, el poder escuchar a otros, hoy en las reuniones nadie se escucha, nos hemos escuchado, hemos sabido decir cosas que normalmente no decimos, de forma rápida y en tan poco tiempo”.

Las palabras de Patricia Gutierrez, Directora de Calidad en Clínica Los Coihues cuando dice lo que más me impacta es como se da la conversación, hay màs elementos que se pueden observar comunicacionalmente en la dinámica, en tan poco tiempo podemos llegar a resultados concretos, decisiones, en las organizaciones no se acostumbra hacer reuniones efectivas con resultados concretos.

Las palabras de la Dra. Giovanna Gutiérrez cuando dice “me sorprendió encontrar todas las respuestas comunes que tenemos al enfrentar preguntas que son transversales sobre todo observando lo difícil que ha sido en nuestra actividad cotidiana que esos puntos de acuerdo común se transformen en acciones. El ejercicio de Coaching Sistémico nos regaló la posibilidad de darnos cuenta de que tenemos problemas y alternativas de solución similares y de convertir nuestras preocupaciones u opiniones en acciones posibles de realizar…al alcance de nuestra mano”.

Y las palabras del Dr. Cristian Montero cuando dice “Ha sido un verdadero regalo este taller ya que nos permitió conocer y percibir el impacto del coaching sistémico al utilizar métodos y estrategias de participación. Una de las grandes tareas para el mundo de la calidad y la seguridad del paciente sigue siendo el involucramiento de toda la organización, particularmente de las autoridades formales. En ese sentido el taller contribuyó al objetivo, se formaron grupos completamente organizados con funciones, tiempos de trabajo y de acciones bien definidas, buscando puntos de encuentro y compartiendo experiencias acumuladas e interrelacionadas las que permitieron llegar a resultados finales efectivos. Es definitivamente una gran herramienta. Sin duda hacen falta más instancias donde el coaching sistémico pueda estar presente. Esta experiencia abrió una gran puerta para continuar avanzando en el camino de la calidad y la seguridad de nuestros pacientes.  Solo resta dar los agradecimientos a Claude Arribas y a Evelyn Muñoz por su participación y gran aporte a la Sociedad Chilena de Calidad Asistencial SOCCAS durante nuestro XIII Congreso Internacional. La alta convocatoria y el entusiasmo percibido en el taller nos dejó totalmente sorprendidos.”

Juan Carlos Ruiz, Repsol, Executive Director for Chemicals

Un equipo aprende a producir resultados excepcionales. Cuando los equipos ya no pueden aprender, la organización tampoco puede.

¡¡¡Intento recordar cómo eran nuestras reuniones antes del Sistémico y recuerdo que sabíamos a qué hora más o menos empezábamos, pero la hora de finalización era difícil predecir!!!

Empezábamos más o menos unos 15 minutos sobre la hora convocada pero la finalizábamos cuando podíamos, con discusiones interesantes pero prolongadas y con frecuencia superfluas que derivaban en desgaste emocional y roce improductivo entre los componentes del equipo, no se plasmaban en un plan de acción e impedían ver todos los puntos programados en los Comités del negocio por desorden y falta de tiempo.

La facilitación y formación en el coaching para el equipo de Comité nos ha permitido poner método, poner orden y conseguir acuerdos empleando menos tiempo. Tenemos reglas que todos respetamos, además de la energía y presencia, empezamos el comité a tiempo y tenemos un ‘para qué’ en cada uno de los temas que proponemos.

Junto a las reglas del equipo, el despliegue de los roles en las reuniones es el otro factor que ha influido muy positivamente para conseguir terminar a tiempo. Somos nosotros quienes manejamos el tiempo y la materia, somos nosotros, quienes nos damos más tiempo o no en función del para qué del tema propuesto. Con el ejercicio y despliegue de los roles es mucho más sencillo llevar a buen término las reuniones.

Definitivamente el coach sistémico y el despliegue de roles nos ha ayudado a ’ganar’, hemos ganado tiempo, hemos ganado como equipo y ha supuesto el descubrimiento de otra palanca relevante para conseguir resultados extraordinarios.

Joël Chatzimichalis, CEO Toute La Marée

Conocí a Claude Arribas por primera vez en 1995. Él era director comercial de una buena empresa de informática y también accionista de la misma. Sus consejos han sido siempre de gran calidad y he estado regularmente satisfecho de los resultados obtenidos.

Cuando se hizo coach, he sido de sus primeros clientes y a día de hoy seguimos todavía colaborando. Me ha permitido estructurar mi empresa para que me convierta en un jefe no indispensable.

Los beneficios de este logro es que tengo colaboradores eficientes y realizados, no tenemos rotación de personal porque sabemos también contratar mejor y, por supuesto, los resultados están ahí.

La performance de Claude Arribas reside en el hecho de que logra hacerte progresar dejándote reflexionar, pidiéndote una dedicación personal importante y en el hecho de que no interviene en ningún momento dando consejos sobre la toma de decisiones.

Pablo Hernando Guttierez, Repsol, Director Innovación, coach interno

De forma emergente, lo que me sale es decir que los últimos 5 años ha sido el periodo que yo considero de mayor crecimiento profesional. En gran parte lo atribuyo a las nuevas perspectivas y hábitos que el coaching sistémico me ha permitido descubrir, primero en mi equipo, y luego como coach.

Esta nueva perspectiva me ha permitido entender qué significa realmente liderar, y cómo la postura del líder tiene que ser la del coach, de la que quiero destacar la escucha (basada en el silencio y en la pregunta sin intención), la humildad (basada en el respeto), la conciencia del sistema y el aprendizaje continuo.

Me cuesta medir lo que ha supuesto para la organización, más allá de la mejora evidente de las reuniones y decisiones del ciento y pico de equipos que se han beneficiado del coaching sistémico, pero sí puedo decir que tengo el convencimiento que, mucho de lo que hemos logrado estos años impulsando la cultura de innovación en Repsol, no habría sido posible si primero, como equipo, no hubiésemos aprendido a trabajar de esta manera.

Y a tus posibles futuros lectores les recomiendo lo que en tus formaciones nos recordabas, “el coaching es como el amor, se hace, no se explica”, y es ésta quizá la mejor recomendación, hacerlo, experimentarlo y evaluar entonces en qué medida nos ha ayudado a lograr nuestros objetivos.

Marcos Mozetic, Repsol, Dirección Ejecutiva de Exploración

Yo estaba a cargo de un equipo muy potente de ocho Directivos, varios de ellos figuras a nivel internacional, pero todos, incluyéndome a mí, bastante cerrados a mirar nuestros desafíos desde un punto de vista que no fuera puramente técnico, subestimando todo lo que fuera un enfoque más integral o humanista (“soft", habría dicho yo antes). Pero, por otro lado, teníamos un problema: reuniones muy poco efectivas (por no decir insoportables), una toma de decisiones que nunca habíamos desafiado y un desconocimiento del carácter de nuestro grupo, de nuestra dinámica. Solamente por ser consciente de estas debilidades, acepté comenzar con alguna sesión de coaching con Claude.

No hay milagros, pero no dejo de admirarme por cómo, con un par de pinceladas, comenzamos a ver un cuadro que no conocíamos; y empezamos por lo básico: nuestros Comités. La prueba contundente de nuestro cambio fue luego de una fusión con otra empresa, al incorporar a miembros de la fusionada (provenientes de una cultura "supuestamente más moderna") a nuestros comités, ver la sorpresa positiva con la que participaban en nuestra dinámica. Los cambios que propone Claude apuntan también a una apertura y transparencia que afectan al rol del líder. Por supuesto que tuve temores de perder algo de "control", pero el posible premio era suficiente para arriesgar. Es sorprendente cómo al incentivar la participación, el orden y el equipo, deja más tiempo al líder para lo importante, y termina por fortalecer notablemente la responsabilidad y ascendiente del mismo.

Jaime Martínez, Repsol, Director general Repsol cultura y desarrollo

Seguramente es su sonrisa cuando se va o quizá esa forma de ir al grano cuando llega. Su profesionalidad cuando enfrenta los retos de su misión pedagógica o la claridad con que enfoca los detalles de sus intervenciones.

A buen seguro, lo definitivo es su preocupación por ser un hombre de su tiempo que trabaja para inclinar la balanza a favor del mundo en un momento crucial para la batalla eterna entre el orden y el caos.

Conocí a Claude Arribas como el profesional que introdujo en REPSOL la potencialidad del Coaching Sistémico; para multiplicar los resultados de nuestros planes, para hacer del trabajo en equipo un ejercicio de alto rendimiento.

Valoro su profesionalidad y generosidad para adecuar los principios de su actuación a la realidad de Repsol, siempre mediante un trabajo constante con los integrantes de los equipos de Innovación y Cultura corporativa.

Gracias a la determinación de sus acciones, hoy contamos con un buen número de coaches que ayudan a nuestros equipos a conseguir resultados superiores en cantidad y calidad y Repsol dispone de la capacidad interna para cristalizar una senda de cambio y mejora.

Andreu Puñet Balsebre, Repsol Petronor, Sus labores

Nos ayudaste, como equipo, a reflexionar y tomar conciencia de las oportunidades de mejora para ganar en eficiencia y cohesión.

El hacernos conscientes de nuestro propio estilo de dirección, en relación con uno de los cuatro perfiles tipo, y de nuestro perfil cultural como equipo nos puso en el camino de la mejora. Pero hacía falta ir un paso más allá y conectar esa nueva conciencia con la acción. En esto también nos ayudaste con la implantación de una herramienta de gestión aparentemente sencilla pero muy potente: “reuniones delegadas”, que nos han permitido tener reuniones más cortas y con mejores resultados en definitiva ser más eficientes. Nos ayudaste a descubrir e iniciar un camino y día a día seguimos avanzando. GRACIAS.

Clare Hart, CEO de ILO y Présidente de FACE Hérault

Claude y yo nos conocemos desde hace más de 30 años cuando ambos frecuentábamos el CJD (Centro de Jóvenes Dirigentes/ Centre des Jeunes Dirigeants).

Intervino hace algunos años como coach individual y como coach del equipo de dirección de FACE Hérault (Fundación Actuar Contra la Exclusión/Fondation Agir Contre l’Exclusion), fundación que tengo el honor de presidir.

Posteriormente, ha intervenido para el equipo comercial de mi Pyme, ILO, de la que soy presidenta.

En ambos casos, su manera de ser nos ha permitido, por un lado, alcanzar muy rápidamente resultados de alto rendimiento medibles, y por otro lado, ha permitido que los equipos desarrollen confianza en sí mismos, se afirmen, tomen decisiones, sean mucho más responsables, autónomos, y menos estresados. Además, este espíritu de performance global se ha extendido al resto de las entidades. Se ha desarrollado una nueva cultura.

Como dirigente o presidenta, sin participar directamente en estas acciones, he tenido yo también cada vez más confianza en ellos y en mí para poder delegar mejor, dar mayor responsabilidad, y eso me ha permitido involucrarme en el ámbito patronal y político, salvaguardando mi vida privada, el placer de hacer y compartir.

Julia Gimenez Garcia, Repsol, Directivo personas y organización áreas corporativas, coach interno

La experiencia de participar en este proyecto fue un REGALO para mí, tanto desde el punto de vista profesional como personal.

En la empresa en la que trabajo hemos invertido mucho tiempo en idas y venidas, reuniones informativas y eso sí muy participativas, con agendas llenas de reuniones no siempre productivas. El coaching sistémico ha mejorado, en mi experiencia, las reuniones haciéndolas más productivas y sobre todo ha creado una conciencia de mayor eficiencia del tiempo, y la necesidad de concretar en un Plan de Acción con responsables y plazos, haciendo que los equipos crezcan como equipos. Estamos en ello, este proceso requiere de tiempo y vamos por buen camino.

He tenido la suerte de ser miembro de un equipo donde se implantó el coaching sistémico y también la experiencia de ayudar a otros equipos a avanzar como equipo, lo cual es un “win to win” para todos.

He mejorado como profesional y tengo la gratificación personal de ayudar a otros.

Bertrand Delvolvé, Veolia, Directeur Développement RH

"Claude conserva una gran sencillez y eso que es realmente potente en situaciones complejas, combinando prudencia con rapidez de ejecución, amabilidad con ambición y transformación. Alguien a quien leer… y por conocer…”

Jean-Pierre Amat, CEO de Novovis

Un jefe de empresa de una Pyme debe estar presente en todos los frentes : financiero, margen, cifra de negocios, relación con los bancos, productos, producción, temas jurídicos, sociales, recursos humanos, compras, comercio, mercado, competencia, innovación, relación con el mundo exterior… y por supuesto, mantenerse en forma y ocuparse de su vida familiar.

Es lo que he elegido, lo asumo porque lo disfruto. Sin embargo todos estos aspectos cambian. No evolucionan todos a la vez. La crisis, la llegada de la mundialización que todo lo acelera, la exigencia según la cual cada detalle te hace ganar uno o dos puntos de margen hacen que uno [el gerente de Pyme] no pueda ser un experto en todos los campos. Y sin embargo, la empresa necesita cada una de estas competencias para ser eficiente, tener una buena performance. Así que, para que la empresa sea eficiente, el jefe de empresa tiende a focalizarse de manera natural, por ego o por facilidad, en lo que le gusta, en su esfera de competencia, en su ámbito de predilección. Para que la empresa obtenga buenos resultados, deberá permitir que sus colaboradores destaquen en los demás ámbitos. Entonces, ¿Con quién? ¿Cómo? ¿Por qué motivo? ¿Como medir la eficacia? ¿Qué quiero realmente?

Un montón de preguntas de música de fondo que ponen en peligro la eficacia del dirigente de empresa.

Con Claude, he podido salir de mi aislamiento y crear un verdadero Comité de Dirección que ha sabido tomar decisiones sin que esté yo presente, lo cual me ha permitido ser más eficaz en mi ámbito de competencia y me ha aliviado.

Me parece importante puntualizar que, después de la puesta en marcha, el efecto causado por los primeros CODIR [Comités de Dirección] ha permitido reemplazar gradualmente a los directivos que no sabían adaptarse a las exigencias en constante evolución de la empresa.

El comité pone de manifiesto las situaciones o las personas que son componentes sólidos, vs fluidos, y paralizan por ello el mecanismo de la evolución y permite que el jefe de la empresa tome las decisiones adecuadas.

Al principio, este cambio de paradigma puede dar la impresión de pérdida de control, pero al contrario permite desarrollar la confianza, delegar, controlando y midiendo solo lo justo al mismo tiempo. La empresa se ha reforzado, anticipa mucho más y mucho más rápido, lo que nos permite mejorar la rentabilidad, la calidad del trabajo y de la relación.

Marie Laure Galland, CEO de CAPWAN

Hemos comenzado el trabajo de coaching juntos en 2003. En aquella época, acababa de crear una nueva empresa en Francia en el campo de la informática de gestión y tenía que tratar varios temas típicos del mundo de las Pymes, sobre cómo ganar performance, cómo crear un auténtico ADN, cómo dar coherencia a nuestro CODIR [Comité de Dirección] compuesto por 5 socios, a nuestros equipos operacionales, cómo responsabilizar a cada uno y dar la máxima autonomía a los colaboradores, cómo mejorar el espíritu de delegación…

En primer lugar, gracias a un trabajo de coaching comercial, Claude Arribas, con su larga experiencia en empresa, ha sabido dinamizar a todos y cada uno, enseñándoles a escucharse a sí mismos y a los demás para alcanzar los resultados deseados

Luego, hemos continuado con el coaching de equipo y Claude nos ha dado herramientas concretas para ser más eficientes en nuestras reuniones y en el seguimiento de nuestra toma de decisiones, a través de un equilibrio entre rigor y benevolencia. Ha contribuido a que cada uno tome conciencia de su rol, de su posición y de sus fortalezas dentro de la empresa. Hemos multiplicado nuestras fuerzas y entendido mejor nuestras debilidades para transformarlas en ventajas increíbles.

Siguiendo la evolución de mi puesto y de mi empresa, hemos continuado la experiencia con un coaching individual de dirección, verdaderamente revelador para un dirigente que debe priorizar constantemente sus acciones, gestionar los conflictos, pilotar su estrategia y ser continuamente ágil. Habíamos instaurado un ritmo de sesiones por teléfono que podían ser muy breves. Mi sensación a día de hoy es que, cuanto más corta es la sesión de coaching, más impacto tiene sobre nuestra eficacia y sobre las decisiones que pueden ser tomadas a posteriori.

En aquel momento, se nos consideraba bastante revolucionarios, ya que,  las Pymes rara vez utilizaban los servicios de un coach. Y eso que la soledad del dirigente debería al contrario empujarlo hacia herramientas para salir de los marcos de referencia habituales y tomar altura.

La mayor riqueza del coaching sistémico reside en nuestros aprendizajes, frente a nosotros mismos y frente a los demás, una verdadera transformación. Cada persona ha dado sentido a lo que aportaba al grupo y a la empresa. El enfoque de Claude Arribas en sus intervenciones nos ha sacudido, nos ha aportado su escucha, sin intervenir jamás en el contenido. Esa distancia nos ha dado más fuerza y nos ha abierto nuevas perspectivas. Para los directivos, esta experiencia de varios años es una adquisición duradera.

También he explorado el coaching en modo Supervisión durante tres años, en un grupo de coaches pilotado por Claude Arribas. Una nueva experiencia que he podido poner en práctica cada día profesional y personalmente. Gracias a la continuidad, este trabajo ha sido eficaz para seguir progresando en mis áreas de mejora.

Para sintetizar los resultados positivos que el coaching sistémico genera dentro de una organización y en los individuos : nos enseña a mejorar nuestra escucha, a explorar el vacío creativo, a catalizar las diferencias, a potenciar nuestras ideas y a transformar nuestras visiones. Nos conduce a la superación de nuestras propias capacidades, para una mayor performance, y por tanto nos lleva a mejorar nuestra contribución y nuestros resultados en toda aquella organización con la que nos comprometamos.

Claude Arribas, un gran profesional del coaching que impulsa las evoluciones del management de mañana.

Gema Santos Martín, Repsol, E&P Information Management Expert and Senior Performance Advisor

Resulta inusual encontrar a personas que se reconozcan, sincera y abiertamente, a sí mismas como personas que no escuchan o que escuchan poco.

Yo misma, por mi educación y dedicación pasada, me he reconocido siempre como una persona que escucha.

Pero el asunto no está tanto en cuánto o qué escuchas.

Lo que comencé/comenzamos a aprender y ser conscientes con Claude fue la enorme cantidad de cosas que estábamos dejando de escuchar y comenzar a escucharnos.

Especialmente, yo, como líder del equipo.

Aunque estés absolutamente convencido/a de que es el equipo el sentido de tu propia existencia y acompañarlo es tu principal tarea, se me mostró con esa firme y contundente mirada que posee Claude, que no estaba mirando con gafas de ver ni escuchando con orejas de oír.

Hoy, puedo reconocer que me tocó duro e, incluso, me sentí enfadada con él. Pero es que volver a tocar tierra y que tus zapatos no sean los adecuados genera molestias e incomodidades, a mí me las provoco y al equipo también.

Él, trabaja y te prepara con bases para ser un equipo de alto rendimiento, conectado y que forma una entidad única con propósito, que se apoya en sus partes y se configura como un equipo.

Con la distancia que te da el tiempo y, actualmente con otro rol en mi organización, puedo afirmar que no conseguimos ser un equipo de alto rendimiento; sí conseguimos ser un equipo y mucho mejores cada uno de nosotros.

Y no es magia sino método, experiencia y convencimiento en que se pueden conseguir aparentes imposibles.

Frédéric Salles, CEO de Matooma

Como startup en pleno desarrollo, hemos recurrido a Claude en distintos momentos de nuestra evolución.

Una startup está siempre en plena ebullición, sobre todo cuando atraviesa etapas de crecimiento fuerte y se ve solicitada en todos los ámbitos, tanto a nivel de recaudación de fondos como por parte de mercados innovadores. Su éxito depende de las buenas decisiones que tome. El hecho de tener a alguien - que no tiene otro interés en su proyecto que el de permitirle alcanzar sus objetivos - es tranquilizador y permite tomar altura.

En un primer momento, hemos necesitado estructurarnos, ya que,  era imposible para mi estar presente en todos los frentes. El enfoque sistémico de Claude nos ha permitido apoyarnos en un verdadero Comité de Dirección, elegir a las personas adecuadas para la continuidad de la empresa. Es evidente que al principio no es fácil, pero el resultado merece la pena.

Ver como tu Comité de Dirección toma decisiones, las aplica, propone soluciones, se responsabiliza de las cifras y del futuro de la empresa es un lujo. Es tranquilizador, permite a cada uno – y me incluyo - salir del aislamiento, ocuparse de las tareas prioritarias y necesarias. Nos olvidamos de lo superfluo. Como dice Claude, nos hemos estructurado como una startup dando a nuestra cultura digital un toque industrial.

Fortalecidos por esta toma de responsabilidades, un año más tarde, hemos pedido a Claude que nos acompañe durante un día para reflexionar y plantearnos los próximos años de Matooma. Su rol es muy sencillo, su presencia nos ha bastado para atrevernos a tomar nuevas decisiones utilizando nuestro ADN digital.

Hemos ganado el premio al « Campeón del crecimiento 2017 »/« Champion de la croissance 2017 » entre 500 empresas francesas cuya cifra de negocios ha crecido de manera significativa entre 2012 y 2015.

Este enfoque sencillo y delegativo que permite Claude es un verdadero catalizador de performance financiera pero también del buen ambiente que reina en Matooma